En España, dos leyes se han convertido en piezas clave en el ámbito de la facturación electrónica: la Ley Crea y Crece y la Ley Antifraude. Ambas buscan transformar y optimizar las prácticas empresariales y fiscales en España.
La ley 18/2022 también conocida como la Ley Crea y Crece tiene como objetivos principales:
Reducir la morosidad: Establece medidas para garantizar pagos puntuales entre empresas, con el objetivo de reducir los retrasos en los pagos que pueden afectar la liquidez de las pequeñas empresas.
Promover la creación simplificada y el crecimiento de empresas en España: Busca facilitar la creación de empresas, reducir las cargas administrativas y fomentar el crecimiento empresarial, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (PYMEs).
Facturación Electrónica Obligatoria: La ley exige la facturación electrónica para todas las empresas. Inicialmente, esto se aplica a las empresas que trabajan con el sector público, pero eventualmente se extenderá a las transacciones entre empresas privadas.
Acceso a la Financiación: Facilita un mejor acceso a la financiación, especialmente para las PYMEs, mejorando el marco para el crowdfunding y otros métodos de financiación alternativa.
La ley 11/2021, también conocida como la Ley Antifraude tiene como objetivos principales:
Combatir y prevenir el fraude fiscal: La ley introduce controles más estrictos sobre las prácticas fiscales y la transparencia financiera:
Prohibición de Software Contable que Permita Manipulaciones: La ley prohíbe el uso de software que permita la manipulación de registros financieros, con el fin de prevenir prácticas como la doble contabilidad o la subdeclaración de ingresos.
Límite en los Pagos en Efectivo: La ley reduce el límite de pagos en efectivo a 1,000 euros para transacciones entre empresas y profesionales, con el objetivo de reducir el blanqueo de capitales y la evasión fiscal.
Control de Criptomonedas: Introduce requisitos estrictos de reporte para la posesión y transacciones con criptomonedas, mejorando la trazabilidad de los activos digitales.
Nuevas Normas de Residencia Fiscal: Establece nuevos criterios para determinar la residencia fiscal, particularmente para individuos que cambian frecuentemente su residencia para evitar impuestos.
Aumento de Sanciones: La ley incrementa las sanciones por incumplimiento, especialmente en casos de fraude fiscal a gran escala, y refuerza los poderes de la Agencia Tributaria.
Diferencias Entre la Ley Crea y Crece y la Ley Antifraude
Enfoque:
La Ley Crea y Crece se centra en el la reducción de la morosidad, el desarrollo empresarial y el crecimiento económico, particularmente a través de la simplificación de la creación de empresas y la promoción de mejores condiciones de financiación para las PYMEs.
La Ley Antifraude se preocupa principalmente por el cumplimiento tributario y la prevención del fraude, con el objetivo de reducir la evasión fiscal y mejorar la transparencia financiera.
Ámbito:
La Ley Crea y Crece se aplica a todas las transacciones comerciales entre empresas y autónomos (B2B) en el territorio español.
La Ley Antifraude se aplica a todas las empresas y autónomos que utilicen sistemas informáticos de facturación.
Impacto en la Facturación:
La Ley Crea y Crece introduce la facturación electrónica obligatoria para empresas y autónomos.
La Ley Antifraude exige el uso de software contable que no permita la manipulación de registros (VERIFACTU/TicketBAI), impactando directamente en cómo las empresas mantienen y reportan sus registros financieros.
Organismos responsables:
La Ley Crea y Crece ha sido impulsada por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, para promover la digitalización empresarial y la reducción en la morosidad.
La Ley Antifraude ha sido elaborada por el Ministerio de Hacienda y Función Pública, para la prevención del fraude fiscal y la regulación de los sistemas de facturación.
Aplicación y plazos:
La Ley Crea y Crece se implementará de forma gradual, comenzando con las empresas que tengan una facturación superior a 8 millones de euros y, un año después, extendiéndose a las empresas con una facturación menor.
En contraste, la Ley Antifraude se aplicará de manera uniforme a todas las empresas a partir del 1 de julio de 2025, con la excepción de aquellas ya sujetas al Suministro Inmediato de Información (SII) o TicketBAI.
Sanciones y consecuencias:
Según la Ley Antifraude, las empresas que fabriquen, produzcan o comercialicen software para manipular la contabilidad pueden enfrentar multas de hasta 150.000€ por cada año de ventas, mientras que los usuarios de dicho software pueden recibir sanciones de hasta 50.000€ por cada año de uso.
Por otro lado, la Ley Crea y Crece establece sanciones de hasta 10.000€ en caso de incumplimiento de la normativa.